Mougra “colmillo de hierro” y el nacimiento del Clan Moud

Para Mougra el honor recientemente conseguido era un arma de doble filo, era el jefe de Colmillo de las alimañas que protegían al señor de la guerra Gristen, líder del Clan Fregro. Quienes en los últimos meses habían obtenido varias victorias y habían acumulado riquezas, esclavos y poder. Era sabido que alguno de los clanes más fuertes pronto apuntaría sus colmillos hacia ellos.
El asenso de Mougra se debió a que fue el único sobreviviente de las Alimañas que protegieron a su señor en la batalla de la Torre Bruja, una batalla que habían perdido antes de empezarla. Gristen, era un carnicero despiadado, pero sabía nada de tácticas de batalla, y mucho menos de tácticas políticas. Había ordenado a los esclavos saquear a los caídos antes de que la torre sea tomada del todo, y las ordas del Clan Moulder salieron de la torre aniquilando todo a su paso. Los guerreros no pudieron contenerlos. Cuando dos regimientos de guerreros de clan cargaron sobre su señor, la velocidad y ferocidad de las alimañas sirvieron solo para darle tiempo a sostener a su señor y escapar por los túneles inferiores. Evitando que una masa le aplaste el cráneo a Gristen perdió la mayoría de sus colmillos. La recompensa de dicho escape no solo fue su asenso a Jefe de colmillo sino un juego de colmillos de hierro-enano mesclado con piedra bruja, creación de Skaylap el Ingeniero Brujo del Clan.
Era hora de preparar a las nuevas alimañas que dirigiría, no cometería el mismo error que cometió su Jefe de Colmillo. Trato a sus guerreros de manera diferente los primeros meses. Logrando los fines de su señor pero sin cumplir al pie de la letra las órdenes dadas, en vez de sacrificar sus soldados para lograr sus cometidos, utilizando emboscadas y trampas para lograr mayor efectividad con las menores bajas posibles, asegurándose así la lealtad de sus soldados, ya que es preferible estar bajo las órdenes del capitán que pierde menos guerreros.
A los ocho meses únicamente cumplían la función de guardaespaldas del señor. Dados sus logros en batalla y que eran la unidad más antigua del clan. Cada día era más difícil sobrevivir, el Clan empezó a crecer así como la cantidad de enemigos. Si bien la mayoría de las excursiones de saqueos terminaban con todos los guerreros muertos, los encargados de robar y saquear tenían el tiempo suficiente para hacer su trabajo. Estrategias armadas por Mougra quien no llevaba el titulo de Caudillo pero cumplía el rol a la perfección. Gristen consultaba todos sus movimientos con el jefe de su guardia, se piensa que no lo nombraba Caudillo y le daba regimientos para que controle, porque con esas herramientas no tardaría mucho en tomar su lugar como Señor del Clan.

Con una gran victoria llego una gran oportunidad. Su misión era escoltar a su señor en una excursión a la superficie. El plan era atacar una base de humanos al sur de Marienburgo. Los humanos esperaban un cargamento de piedra bruja proveniente de una ciudad humana en ruinas llamada Mordheim.
El asalto fue un éxito, con un mínimo de bajas y cinco cajones de piedra bruja como trofeo. El fuerte de madera de los humanos había quedado desierto. Gristen encabezaba, con todos sus soldados de escolta, el regreso con su preciado botín. Por primera vez no espero a que se saque el lugar, ni siquiera probó la carne de los humanos que había matado. Mougra solicito a su señor que deje a él y sus alimañas el derecho de saquear e incendiar el fuerte como acostumbraban, y este asintió sin detenerse a pensar que tesoros escondería esa extraña construcción.
El jefe de Garra, También apodado “Colmillo de hierro” no incendio el lugar, ya que era perfecto para sus planes. Semanas antes, El había sido encargado de comprar la información sobre la llegada de ese cargamento, y también se ocupo de venderla por muchísimo más al vidente Gris Arqueek. Quien tomaría la vida de su señor, y su cargamento de piedras brujas al mismo tiempo que el Clan Moulder se abalanzaba sobre la guarida del Clan Fregro.

Esa tarde Mougra entro en la fortificación humana con una luz brillante en sus ojos. Su clan había dejado de existir, y su señor daba los últimos pasos hacia la emboscada que terminaría con su vida.
Las Alimañas, que no dudaron en seguirlo, así como varios de los Guerreros de Clan que comandaba, lo saludaban y alababan como a un Señor. En unas horas se reuniría con el Skaylap con las ratas ogro, los señores de las bestias y las armas que eran parte del trato con el Clan Moulder. Con la llegada del Ingeniero Brujo, el plan de Mougra tocaría su fin, en una tarde se había convertido en señor y dado vida a un nuevo clan.
Al amanecer del día siguiente el consejo de los trece aprobó la creación del Clan Moud, apadrinados por el Clan Moulder, y con la seguridad de que habitarían en esa zona del exterior. También se dejo en claro que no intervendrían ni reclamarían parte de los saqueos del ya extinto Clan. Parte de las obligaciones del nuevo clan seria proteger la entrada norte de los túneles que llevan al Abismo Negro.